Si una persona tiene que estar bastante tiempo en la cama porque se está recuperando de una lesión, se pueden llegar a producir lo que se conocen como escaras que no es otra cosa que úlceras producidas por la presión. La gran ventaja de utilizar este tipo de colchón es que se indica para cualquier paciente que, por las razones que sean, van a estar inmovilizados durante algún tiempo: por ejemplo, aquellos que tengan algún tipo de fractura, que tengan alteraciones en el flujo sanguíneo, que presenten problemas de carácter neurológico, que tengan sudoración excesiva, incontinencia fecal o vesical, así como cualquier otro problema relacionado.